El feminicidio es el asesinato de mujeres por el hecho de ser mujeres

Una pandemia prevenible

Jurídicamente, desde hace algunas décadas en Colombia se viene reconociendo la igualdad entre hombres y mujeres, pero la igualdad material aún parece remota.

La discriminación por razón de género persiste, la violencia contra las mujeres es letal y atraviesa la vida de todas.

El feminicidio como máxima expresión de violencia y discriminación contra la mujer es la manifestación de una sociedad donde persisten las relaciones desiguales de poder entre hombres y mujeres, y según datos de la Fiscalía General de la Nación cobró la vida de 849 mujeres entre 2015 y 2019 en el país (Ver Masatugo 2021).

La magnitud del feminicidio demuestra que queda mucho camino por andar, y que todo esfuerzo será en vano si la sociedad no reflexiona sobre las conductas cotidianas que naturalizan la violencia contra las mujeres, atenúan su gravedad y responsabilizan a la víctima.

Origen y alcance del término

En el primer tribunal internacional de la mujer, celebrado en 1976, la feminista Diana Rusell empleó por primera vez el término femicide para referirse a la forma de violencia extrema que termina con la vida de las mujeres, producto de condiciones sociales que legitiman la desigualdad de género.

En América Latina, fue la antropóloga Marcela Lagarde quien introdujo este concepto en 1994, traduciéndolo como feminicidio.

El feminicidio es la manifestación más brutal de una sociedad patriarcal y se refiere al asesinato de una mujer por el hecho de serlo, el final de un continuum de violencia.

El Modelo de protocolo latinoamericano de investigación de las muertes violentas de mujeres por razones de género señala que las muertes violentas de mujeres por razones de género se clasifican en dos categorías:

Femicidios activos o directos: 

  • Muertes de mujeres y niñas como resultado de violencia doméstica, ejercida por la pareja en el marco de una relación de intimidad o de convivencia 
  • Asesinato misógino de las mujeres
  • Muertes de mujeres y niñas cometidas en nombre del “honor”
  • Muertes de mujeres y niñas relacionadas con situaciones de conflicto armado (como estrategia de guerra, opresión o conflicto étnico)
  • las muertes de mujeres y niñas relacionadas con el pago de una dote
  • las muertes de mujeres relacionadas con la identidad de género y con la orientación sexual (femicidios lesbofóbicos)
  • Infanticidio femenino y la selección de sexo basada en el género (feticidio)
  • Muertes de mujeres y niñas relacionadas con el origen étnico y la identidad indígena.

Femicidios pasivos o indirectos

  • Muertes debidas a abortos inseguros y clandestinos; 
  • La mortalidad materna; 
  • Muertes por prácticas dañinas (por ejemplo, las ocasionadas por la mutilación genital femenina); 
  • Muertes vinculadas al tráfico de seres humanos, al tráfico de drogas, a la proliferación de armas pequeñas, al crimen organizado y a las actividades de las pandillas y bandas criminales; 
  • Muertes de las niñas o de las mujeres por negligencia, por privación de alimento o maltrato; 
  • Actos u omisiones deliberadas por parte de funcionarios públicos o agentes del Estado.
     

 

El feminicidio, el asesinato de mujeres por el mero hecho de ser mujeres, arroja cifras cada vez más escalofriantes. Este tipo de violencia no conoce fronteras y afecta a mujeres y niñas de todas las edades, de todos los estratos económicos, de todas las razas y de todos los credos y culturas. Desde las zonas de conflicto hasta los espacios urbanos y los campus universitarios, se trata de violencia que nos obliga a todas y todos a actuar como agentes preventivos de esta pandemia y a tomar medidas ahora.

Phumzile Mlambo-Ngcuka

EX- Directora Ejecutiva de Onu Mujeres
recuerda, el machismo matarecuerda, el machismo mata